El temporal de
Argentina de abril de 2014 (mal denominado por algunos medios como
la tormenta Lucrecia
consistió en severas precipitaciones de forma torrencial que
afectaron varias provincias de Argentina. La conurbación de Neuquén -
Plottier - Cipolletti en el Alto Valle del Río Negro fue la zona
más afectada, donde se registró un fallecido y más de 1500 evacuados por
inundaciones, siendo el peor temporal en los últimos 40 años .Las
provincias de Santa Fe (donde hubo dos fallecidos), Catamarca y Santiago
del Estero fueron otros de los distritos más afectados por inundaciones y
aludes. Otro fallecido se reportó en Telsen, provincia del Chubut,
que se convirtió en la localidad más afectada de dicha zona. El 6 de abril,
ocurrió un frente de baja presión que comenzó en el centro del país y un foco
de tormenta que se inició en las provincias de Neuquén y Río Negro. El Servicio
Meteorológico Nacional realizó varias «alertas meteorológicas».En total
fueron evacuadas más de 3000 personas en todo el país. Varias ONGs e
instituciones han pedido colaboración de la población para ayudar a los
afectados.
El Senado de la Nación Argentina declaró el 9 de
abril la «emergencia climática» por treinta días en localidades de Neuquén, Río
Negro, La Pampa, Santa Fe, Chubut y Catamarca. La Administración Federal
de Ingresos Públicos anunció que suspendió por 120 días el cobro de
impuestos a los contribuyentes afectados por las inundaciones en las provincias
afectadas.
Las precipitaciones de los días 5 y 6 de abril estuvieron
asociados a la presencia de un sistema de baja presión en niveles
medios de la atmósfera sobre la porción este del sur del Océano
Pacífico, entre los 20° y 40° de latitud sur. Este sistema, junto a la
presencia de una masa de aire relativamente más húmeda y cálida sobre el centro
y noreste de Argentina, la existencia de un sistema de baja presión en
superficie sobre la región noroeste de Argentina, y el aporte de humedad por
vientos en dirección este sobre la Patagonia, favorecieron las condiciones
de inestabilidad atmosférica, provocando que ocurran varias tormentas de
diferentes intensidades en el norte de la Patagonia y la región central y este
de Argentina. Entre el 7 y el 8 de abril, este sistema se desplazó hacia el
noreste de la Patagonia y se desarrolló un sistema de baja presión en
superficie sobre dicha región, generando eventos de abundante precipitaciones.
La región centro también se vio afectada. En estas precipitaciones, han caído
gran parte de la lluvia normal anual en varias de las provincias afectadas, y
en ciertas ciudades ha llovido en unos pocos días más que el promedio para el
mes de abril. Hubo estaciones donde el monto registrado también superó el
récord mensual histórico anual y otras el récord de precipitación acumulada en
24 horas. La mayoría de la lluvia caída se reportó en el Alto Valle del
Río Negro, noreste de La Pampa, centro de Buenos Aires y en varias partes
de Santa Fe . En cuanto a las ráfagas de viento, las mayores se registraron en
Neuquén (las cuales alcanzaron entre 70 y 79 km/h), Río Cuarto en
Córdoba (66 km/h) y Bariloche en Río Negro (57 km/h).
Para el 9 de abril las condiciones climáticas
habían mejorado y las precipitaciones cesaron en varias provincias.
Algunos expertos hablaron sobre las tormentas. El
meteorólogo del Conicet, Carlos Zotelo, dijo que «lo llamativo es que
hayan ocurrido lluvias intensas en varios puntos al mismo tiempo». La
meteorólogoa Miriam Andrioli, del Servicio Meteorológico Nacional, explicó que
se conjugaron dos fenómenos: «en la zona central del país se desataron
tormentas por una masa de aire cálida y húmeda que bajó desde el Sur de Brasil y
desde Paraguay y se mezcló con un frente caliente que estaba en la
provincia de Buenos Aires, lo que generó nubes de gran magnitud. En la
Patagonia y Catamarca, avanzó aire húmedo desde el Océano Atlántico y
se combinó con un centro de baja presión que llegaba desde el Pacífico».
Neuquén
En la capital de la provincia de Neuquén cayó
hasta el 7 de abril un récord histórico en la región de 204,6
milímetros de agua, más que el promedio anual provincialy se convirtió en la
zona más afectada del país. La provincia ya recibía precipitaciones en forma
discontinua desde el 2 de abril, pero la más grande se registró el día 7
por la mañana. El intendente de Neuquén, Horacio Quiroga, dijo el lunes 7 que
«en un lapso de 24 horas cayeron 118 milímetros, que se sumaron a los 100
milímetros acumulados por las precipitaciones registradas desde el pasado
miércoles» (2 de abril). Las ráfagas de viento alcanzaron los 70 kilómetros por
hora y se reportaron inundaciones en toda la ciudad, alcanzando un metro en
algunos barrios. Se declaró «emergencia climática», se evacuaron más de 1.500
personas —en toda la provincia, de los cuales 900 fueron en la capital—,que
fueron alojadas en dependencias provinciales y municipales, y se decretó asueto
en el sector público, suspensión de clases y de servicio de transporte público.
También fueron cerrados los accesos a la ciudad y las rutas 40, 237 y 7 (que
conducen hacia San Patricio del Cañar, Añelo y Rincón de los Sauces) y fueron
cortados los servicios de electricidad y agua potable.
La situación más grave en la provincia se registró en Neuquén
Capital, Plottier, China Muerta, Piedra del Águila, Picún
Leufú, El Chocón, Arroyito, Centenario, Vista Alegre, Añelo, Rincón
de los Sauces, Senillosa y El Chañar, reportándose más de
300.000 personas afectadas. En la capital provincial falleció una jubilada de
70 años por problemas respiratorios durante la tormenta. Las autoridades
locales anunciaron que un 80 por ciento de las calles de la capital neuquina
estaban anegadas hacia el 8 de abril (día que finalizaron las lluvias); que los
cuantiosos daños materiañes causarían pérdidas millonarias y que demandarían
mucho tiempo para su reparación. El intendente local afirmó que «el temporal de
lluvia de los últimos días destrozó toda la ciudad».El gobierno provincial
también anunció que los daños a viviendas y comercios ocasionados por el
temporal de lluvia serán relevados para elaborar un plan de contingencia y
reparación. Se reportaron en la capital provincial 184 kilómetros de calles
afectadas, cuya recuperación costará cerca de $ 34 millones de pesos.
El 11 de abril, tras recorrer las zonas afectadas, el gobierno provincial
anunció que creará una «unidad ejecutora» para realizar los trabajos de
reconstrucción. Para ese día, un 90 % de la ciudad había recuperado el
servicio de electricidad y agua potable.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner manifestó
«solidaridad y apoyo» a la provincia y se comunicó con la vicegobernadora Ana
Pechen para garantizar la asistencia nacional a través del Ejército y
Gendarmería. También se comunicaron con el gobierno neuquino la ministra de
Desarrollo Social, Alicia Kirchner, y el jefe de Gabinete, Jorge
Capitanich. La Agrupación XII "Comahue" de la Gendarmería
Nacional Argentina afectó recursos humanos a las acciones de apoyo a la
comunidad, evacuación y distribución de mercadería y desplegó móviles. Por la
tarde del 7 de abril el Gobierno nacional dispuso que el Ejército
Argentino preste «ayuda humanitaria» en Neuquén para ayudar a los
damnificados. La dirección general de Comercio Interior, Lealtad Comercial y
Defensa del Consumidor de Neuquén emitió una disposición en la que advirtió
sanciones a los comercios que especularan con los precios de los artículos de
primera necesidad tras el temporal.
Río Negro
Las zonas más afectadas de la provincia de Río Negro por
las lluvias del 7 de abril fueron el Alto Valle y la costa Atlántica.
En las ciudades rionegrinas de Cipolletti, General Roca y Villa
Regina, hubo anegamientos, se suspendieron las clases, hubo cortes de luz y
agua potable y se evacuaron 500 personas. En el Alto Valle también hubo rutas y
caminos cerrados. También se reportó una ruptura en el canal de Cinco
Saltos que complicó el suministro de agua potable en varias localidades.
En la costa atlántica, 48 personas fueron evacuadas en San Antonio Oeste y
en Las Grutas, que también sufrieron anegamientos. Además se desbordó un
arroyo a la altura de Sierra Grande que obligó un corte de la ruta
nacional 3 entre el 7 y 8 de abril. Ya por el mediodía del 8, la ruta
volvió a cerrarse temporalmente tras el desborde del Arroyo Verde. Entre unas
450 y 500 personas de diversas localidades como Ingeniero Jacobacci, Maquinchao y Valcheta,
fueron evacuadas a raíz del fuerte viento que ocasionó caída de árboles.
El temporal también frustró las dos primeras etapas del
rally Desafío Ruta 40 que iban disputarse en la provincia,
postergando por tres días el inicio de la competencia que fue trasladado
a Zapala en Neuquén. El 9 de abril, la ruta nacional 3 volvió a
cerrarse tras derrumbarse él puede del Arroyo Verde, en el límite con
Chubut, debido a la crecida extraordinaria del curso de agua. La caída del
puente no solo afectó a las comunicaciones por vía terrestre entre el norte y
sur de Argentina, si no que también afectó a la fibra óptica de la
empresa Claro, cuyo corte dejó sin servicio de Internet y telefonía al
sur argentino y a la región de Magallanes en Chile. Las obras de
reconstrucción comenzaron el 10 de abril, avanzando a un rápido ritmo,
hasta que reabrió la ruta por la noche del día siguiente.
Chubut
La zona más afectada por las lluvias y vientos de esta
provincia fue la zona noreste: en Trelew y Puerto Madryn hubo
calles anegadas, provocando casi cien evacuados el 8 de abril. Se suspendieron
las clases en estas ciudades, en Rawson (donde también suspendieron
el servicio de agua potable), en Gaiman y en otros establecimientos
del valle inferior del río Chubut. En total, en toda la provincia fueron
evacuadas alrededor de 200 personas. En diez horas llovió en Trelew 68
milímetros y en Madryn 100. Seis barcos que estaban amarrados, causaron graves
daños al muelle Almirante Storni de Puerto Madryn durante el temporal. En
Rawson se desbordó la Laguna Negra y se inundó la costanera de Playa
Unión.
Telsen fue la localidad más afectada de la provincia.
Aquí el arroyo homónimo debordó cien metros de cada lado tras llover
140 milímetros, afectando también el sector de chacras. Además la zona
quedó incomunicada con el resto de la provincia por anegación en las rutas 4 y
8 y unas 30 familias fueron evacuadas. El gobierno provincial intentó llegar al
poblado pero no pudo. En esta localidad se informó que un hombre de 94 años
falleció luego de que se inundara su casa y que se está buscando a un peón
rural desaparecido. El 9 de abril un equipo de funcionarios, incluyendo el
gobernador Martín Buzzi, y personal operativo de la provincia partió hacia
Telsen para socorrer a la población afectada y también se trasladaron dos
helicópteros de la Armada Argentina, y uno más del Ejército. El gobierno
provincial declaró la emergencia en todas las zonas afectadas, incluyendo
Arroyo Verde en el límite con Río Negro.
Santa Fe
En el centro y sur de la provincia de Santa Fe, a raíz
de las intensas lluvias del 7 de abril fueron evacuadas 300 personas de
distintas localidades y debieron cortarse las rutas nacionales 34 y 8 por
acumulación de agua sobre la calzada. También se reportaron inundaciones en
varias zonas. Algunas de las ciudades afectadas fueron Coronda, Vera, San
Cristóbal, San Guillermo, Monigotes (donde precipitaron 445
milímetros en un solo día), Monte Oscuridad (donde llovió 437
milímetros), Ramayón, Curupaytí (donde las precipitaciones
también superaron los 400 milímetros), Santa Clara de Saguier, Coronel
Fraga, Suardi, San Justo, Cañada Rosquín, San Martín de las
Escobas, entre otras. Las lluvias en ocho de los 19 departamentos fueron de 230
y 300 milímetros, con picos de hasta 450 milímetros. En el departamento
Castellanos se reportaron 70.000 hectáreas inundadas. En otras de las
zonas afectadas también se reportaron anegamientos en los campos, que
recibieron el excedente hídrico de localidades. En Rosario, se reportaron
150 árboles caídos, causando inconvenientes en el tránsito y cortes de
electricidad. En esta ciudad cayeron sólo 32 milímetros pero los vientos
alcanzaron los 100 kilómetros por hora. La línea K de trolebuses fue
interrumpida.
El director del Sistema de Estimaciones Agrícolas de
la Bolsa de Comercio de Santa Fe, Rubén Walter, explicó que se afectaron
1.100.000 hectáreas de cultivo de soja. También indicó que el agua está
escurriendo lentamente hacia la cuenca media del río Salado y está
impactando en campos de soja, sorgo y maíz, que permanecen
anegados. En cuanto a la localidad de Villa Saralegui, está totalmente
aislada del resto de la provincia y hay zonas con un metro de agua en calles y
viviendas. Mientras que el 9 de abril permanecen cortadas e inundadas tramos de
las rutas 11, 34, 8 y 13. En esta provincia fallecieron dos personas, una en
el departamento San Justo y otra en el departamento Las Colonias
Buenos Aires
Por la caída de 63 milímetros en poco más de dos horas el 8
de abril, el río Luján creció más de cuatro metros dejando como un
saldo más de 400 evacuados en varios barrios de la ciudad del mismo nombre por
anegamiento de calles y viviendas. Los barrios más afectados fueron Padre
Varela y San Fermín. También se informó que la Basílica de Lujánno se vio
afectada y que en total cayeron 80 milímetros en todo el día, decretándose una
«alerta naranja». En Ramos Mejía, en el partido de La Matanza (Gran
Buenos Aires), un aliviador del arroyo Maldonado provocó la rotura
del pavimento de una avenida formando un cráter de cuarenta metros. Además, se
reportaron daños y evacuados en Carmen de Areco, San Pedro (donde
granizó) y La Matanza. El gobierno provincial también envió asistencia a General
Arenales, Saladillo, Salto, Ezeiza, San Fernando, Lomas
de Zamora, Avellaneda y Brandsen.
En la pampa húmeda, como consecuencia de la tormenta se
estima una pérdida de al menos un millón de toneladas en la cosecha de soja,
que representarían US$ 525 millones menos de divisas que ingresarán al país, y
una disminución en la producción de leche. Hacia el 8 de abril la cosecha
estaba paralizada y había problemas para entrar a los lotes y sacar la
producción por caminos secundarios. Expertos de la Bolsa de Cereales de
Buenos Aires informaron sobre las «importantes pérdidas» que dejó el
temporal.
Para el 10 de abril, en Luján el río solo había
descendido diez centímetros y se mantenían unos 400 evacuados.
Catamarca y Santiago del Estero
En las provincias de Catamarca y Santiago del
Estero, unas 500 personas fueron evacuadas por el temporal de lluvia y vientos
huracanados que comenzaron el 6 de abril por la noche en la zona
fronteriza de ambas provincias, con desborde de ríos y aludes. La mayor
cantidad de evacuados fueron de la localidad catamarqueña de Bañado de
Ovanta, donde viajó ayer a la mañana la gobernadora Lucía Corpacci para
dirigir un operativo de asistencia. En esa localidad del departamento
Santa Rosa, en casi dos horas cayeron 200 milímetros de lluvia, acompañada de
vientos que superaron los 80 kilómetros por hora, provocando aludes de
barro. Además, las inundaciones afectaron al hospital local, quedando
totalmente inutilizado.
También fueron evacuadas unas 100 personas en las
localidades santiagueñas de Lavalle y Villa La Punta, donde un
alud causó daños en la localidad. Un relevamiento de los Consorcios Regionales
de Experimentación Agrícola informó de anegamientos en los departamentos Guasayan y Choya,
en el sudoeste de Santiago del Estero. El gobierno nacional dispuso la
asistencia del Ejército para la búsqueda, evacuación y ayuda de los afectados.
Córdoba
En la provincia de Córdoba, unas 200 personas fueron
evacuadas, y las ciudades más afectadas fueron Obispo Trejo, Las
Varillas, Corral de Palos, Isla Verde y Morteros, por la
caída de más de 200 milímetros de agua entre el 6 y 7 de abril. Se reportaron
también daños en varias viviendas e inundaciones en caminos, rutas y zonas
rurales.
En la Ciudad de Córdoba, la crecida del río Suquía provocó
anegamientos de viviendas y el corte del tránsito en la avenida Costanera. La
localidad de Obispo Trejo fue la más afectada en la provincia, luego de que los
canales de desagüe y el río Jesús María debordaran y el centro urbano
quedara cubierto por el agua. Para el 9 de abril, la situación se había
normalizado. En esta provincia fallecieron dos personas.
Otros distritos
El temporal también afectó a unas 80 familias en el valle
de Uco en la provincia de Mendoza. Las alertas meteorológicas
también se han extendido a las provincias de Corrientes y San
Luis . En la provincia de Tucumán, se registraron anegamientos en el departamento
La Cocha, especialmente en la localidad de Rumi Punco.
En la provincia de La Pampa —donde llovió varios
días—, se registraron inundaciones en Santa Rosa el 7 de abril y se
suspendieron las clases.
En la provincia de Entre Ríos más de 100 familias
de la ciudad de Paraná fueron asistidas tras las lluvias y ráfagas de
viento que la afectaron desde el 5 de abril. Alrededor de 12 barrios de la
capital entrerriana fueron alcanzados por el temporal, registrándose caídas de
árboles y postes de luz, voladura de techos e inundaciones de viviendas.Varias
localidades del departamento Diamante, resultaron anegadas por la caída de
160 milímetros de agua. En el departamento La Paz cayeron más de 100
milímetros. Varios caminos vecinales fueron cortados.
En la ciudad de Buenos Aires, las lluvias causaron el
cierre temporal de la autopista Illia y algunos anegamientos en
calles y avenidas de varios barrios (Palermo, Villa Crespo, Belgrano, Almagro, Flores,
entre otros) como así también caída de árboles. Las lluvias caídas en la
ciudad entre la medianoche y las seis de la mañana del 8 de abril totalizaron
51.5 milímetros, según el Observatorio Central de Buenos Aires. Una vez
terminada la tormenta, los vuelos se reanudaron normalmente en el Aeroparque
Jorge Newbery tras el cierre de la estación aérea durante la madrugada del
día 8. Algunos vuelos hacia las zonas más afectadas fueron suspendidos o
desviados.